Es difícil definir a una industria o profesión como la más peligrosa ya que todo dependerá de que variables estemos utilizando para medir el peligro. Sin embargo, sin importar qué criterio utilicemos, existen ciertas profesiones que se mantienen en lo más alto de la lista fluctuando un par de lugares en el ranking según cómo definamos al peligro, pero encabezando la clasificación al fin.
El más alto número de fatalidades por cada 100.000 trabajadores
Si utilizamos este criterio, la categoría de agricultura, pesca y caza se queda con el puesto número uno. Según la Oficina de Estadísticas de Trabajo (BLS por sus siglas en inglés) en el 2019 se reportaron 145 heridas fatales (enlace en inglés) por cada 100.000 trabajadores.
El más alto número de fatalidades
La industria de la construcción es la que más fatalidades sufre (enlace en inglés). Esta industria ha reportado un número de muertes altísimo para el año 2019, 1.061.
Le sigue la industria de transporte y almacenamiento en segundo puesto, con 913 muertes reportadas en el 2019 según la BLS.
¿Cuáles son las principales causas de estas fatalidades?
Los accidentes durante transporte son la principal causa de muerte. Las otras causas (enlace en inglés) en orden de importancia son las caídas, resbalones y tropiezos, heridas por otras personas o animales, contacto con objetos o equipos, exposición a sustancias o ambientes dañinos e incendios y explosiones.
En síntesis, todas las listas de profesiones más peligrosas tienen a estas industrias encabezándolas en los primeros puestos:
- Construcción
- Agricultura, pesca, minería, leña, caza
- Transporte y almacenamiento
Las cifras son alarmantes. ¿Existe alguna forma de bajarlas?
Existen medidas a nivel regulatorio que podrían implementarse, como por ejemplo aumentar las multas para las empresas que no proveen la debida capacitación, equipos de seguridad, etc. Sin embargo, también existen formas para que usted como trabajador se proteja.
En pos de poder asegurar un mínimo de seguridad para la salud de los trabajadores, existen regulaciones y obligaciones que los empleadores deben asegurar que se cumplan, y usted debe ser informado y educado sobre esta protección debida.
El problema es que muchas veces se hace vista ciega a los protocolos de seguridad obligatorios, y se decide ignorarlos deliberadamente para poder ahorrar en gastos y tiempo. El uso de equipos de trabajo de baja calidad, y la escasa capacitación para los trabajadores juegan también un rol fundamental para explicar el por qué del elevadísimo número de accidentes.